Efectivos de la Policía Estatal de Indiana y de la Policía de la Universidad de Indiana detuvieron a 33 manifestantes, en su mayoría estudiantes, que rechazaban el genocidio israelí en la Franja de Gaza y que en señal de protesta y solidaridad con Gaza habían levantado un campamento en el campus Dunn Meadow.

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De acuerdo con reportes de prensa, los manifestantes instalaron sus tiendas a las 11H00 hora local y alrededor de las 16H00 cargaron contra ellos los agentes, que utilizaron la fuerza física aunque la protesta tenía carácter pacífico.

Durante esas horas, los jóvenes exigieron a la Universidad de Indiana renunciar a los fondos que aportan los lobbies israelíes, a los cuales consideran una manera de reproducir el sionismo, apoyar la narrativa del «pueblo elegido» y disipar cuestionamientos sobre el genocidio que la entidad sionista comete contra Palestina desde 1948.

A lo largo de la jornada, la Policía trató de amedrentar en varias ocasiones a los jóvenes. Les trasmitieron que el gobernador del estado, Eric Holcomb, estaba al tanto de la situación y que el departamento policial preveía practicar arrestos si no se retiraban. Incluso, apostaron francotiradores en lugares altos del recinto.

En respuesta, los manifestantes reorganizaron las tiendas y, tomados del brazo, las rodearon para protegerlas. Reportes indican que la Policía los sacó por la fuerza del campus, arrastrándolos y esposándolos. Llevaban equipamiento antidisturbios y portaban armas de asalto, pistolas, escudos y gas pimienta.

Luego trasladó a los detenidos a la cárcel del condado de Monroe. Agentes declararon que los detenidos serán acusados ​​del presunto delito de invasión de propiedad, allanamiento de morada, agresión y resistencia a la aplicación de la ley.

Algunos de los detenidos, en breves declaraciones a familiares o amigos tras el arresto, declararon que se violó su derecho a la libertad de expresión, contemplado en la Primera Enmienda de la Constitución.

Tras derribar las tiendas de campaña, los agentes crearon un perímetro y desde sus posiciones hostigaron a los manifestantes que, pese a sus abusos, permanecieron en el lugar coreando consignas en solidaridad con Palestina.

La organización que articuló la protesta, denominada Coalición de Desinversión de la Universidad de Indiana, manifestó en un comunicado sus demandas.

Además de exigir que el centro de altos estudios se desvincule de fondos que aporte Israel, quieren que se deshaga totalmente de sus inversiones financieras en este país y que en sus instalaciones se abran centros culturales musulmanes y de Oriente Medio. Asimismo, demandan la renuncia de la presidenta del centro universitario, Pamela Whitten, del rector Rahul Shrivastav y la vicerrectora de Asuntos Académicos y Facultad, Carrie Docherty.

Estudiantes de otras universidades estadounidenses, radicadas en estados como Nueva York, Boston, Connecticut, California y Michigan también protestaron durante las últimas horas contra el apoyo cómplice del Gobierno de los EE.UU. a Israel y al genocidio que la entidad sionista perpetra en la Franja de Gaza. Desde el 7 de octubre a la fecha, las fuerzas de ocupación han asesinado en ese territorio palestino a más de 34.300 civiles, en su mayoría mujeres y niños.

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